lunes, 30 de septiembre de 2013

Inteligencia fílmica

Desde que en 1983 el psicólogo norteamericano Howard Gardner publicara su teoría de las inteligencias múltiples, hemos asimilado que la inteligencia no es una capacidad única -asociada al rendimiento académico o que se pueda medir por un coeficiente- sino que se despliega en diversas potencialidades de las que llegamos a desarrollar más unas que otras. Si la inteligencia es la “capacidad de resolver problemas y/o elaborar productos que sean valiosos en una o más culturas”, ordenando los pensamientos y coordinándolos con las acciones, éstas pueden ser: lingüística, lógica-matemática, corporal-cinética, visual-espacial, musical, interpersonal-social, intrapersonal y naturalista; en 1995, el psicólogo Daniel Goleman aportó la idea de inteligencia emocional.

Pero hasta ahora nunca habíamos escuchado hablar de la inteligencia fílmica. Este artículo denominado “La Inteligencia fílmica: La comprensión audiovisual y su desarrollo en la infancia y adolescencia”, de Tomás de Andrés Tripero (Dr. en Psicología y profesor titular de la Universidad Complutense de Madrid) nos introduce en este nuevo concepto:

"En primer lugar, tendremos que definir, en términos operativos, qué es la inteligencia y después definir qué es lo que entendemos por inteligencia fílmica. Hay dos ideas que parece englobar todas las definiciones tradicionales de inteligencia: la inteligencia es la capacidad de aprendizaje por la experiencia y la capacidad de adaptación del individuo al medio. Por nuestra parte, podemos llegar a definir la inteligencia fílmica atendiendo, al menos, a cuatro puntos de vista diferentes [...]:

Desde el punto de vista de la inteligencia lógica, entendemos la inteligencia fílmica como la capacidad de comprender la estructura y secuenciación de una narración cinematográfica ofrecida por el proceso de montaje [...]
Desde el punto de vista de la inteligencia de aprendizaje valoraríamos la inteligencia fílmica como la capacidad de recordar comprensivamente lo asimilado a través de un recurso multimedia [...]
Desde el punto de vista de la inteligencia emocional, entenderíamos la inteligencia fílmica como la capacidad de distinguir con claridad los mensaje afectivos, ya sean de carácter positivo o negativo [...]
Desde el punto de vista de la inteligencia moral juzgaríamos la inteligencia fílmica como la capacidad de comprensión de los valores o contravalores transmitidos"

Este tipo de inteligencia implica reconocer en el cine una forma de expresión propia que requiere de unas capacidades específicas para su comprensión. Del mismo modo que alguien puede tener cualidades para el lenguaje oral y escrito, la resolución de problemas matemáticos, expresarse a través de las sensaciones corporales, pensar en imágenes, identificar los sonidos, tener capacidad de liderazgo, conocerse a uno mismo y entenderse con la naturaleza, se puede llegar a tener una capacidad creadora que sepa abstraer la realidad o comunicar una ficción por medio de imágenes en movimiento.

Aunque su estudio va dirigido al análisis y desarrollo de esta capacidad cognitiva desde bebés a adolescentes y el uso del argumento fílmico como recurso educativo, no deja de ser interesante incorporar esta nueva perspectiva a nuestras reflexiones y críticas sobre cine. Desde luego explicaría la genialidad de creadores como Tarkovsky, Bergman, Felini, Buñuel…


viernes, 27 de septiembre de 2013

El bosque animado

Ficha  técnica: Título original: “El bosque animado” Año y nacionalidad: 1987, España. Producción: Eduardo Ducay, Emiliano Otegui para Classic Films Productions. Dirección: José Luis Cuerda. Dirección artística: Félix Murcia. Guión: Rafael Azcona basado en la novela homónima de Wenceslao Fernández Flórez (1943). Fotografía: Javier Aguirresarobe. Música: José Nieto. Duración: 108 minutos. Intérpretes: Alfredo Landa (Malvís/Fendetestas), Tito Valderde (Geraldo), Alejandra Grepi (Hermelinda), Encarna Paso (Juanita Arruallo), Miguel Rellán (Fiz de Cotovelo), Alicia Hermida (Gloria Roade), Amparo Baró (Amelia Roade), Fernando Rey (Sr. D’Abondo), María Isbert (Moucha), Luis Ciges (Loco de Vos), Luma Gómez (Marica da Fame).

Argumento: La Fraga de Cecebre es un bosque animado donde confluyen las almas de numerosos personajes, aparentemente inconexos entre sí pero vinculados por la magia del lugar. “La fraga es ella misma un ser compuesto de muchos seres. Como la ciudad. Pero es más varia que la ciudad, porque en la ciudad el hombre lo es todo y su carácter se imprime hasta el panorama urbano, y en la fraga el hombre resulta apenas un detalle del que se puede prescindir”.



Ambientación: A finales de los ‘80, Cuerda es un director formado en los documentales y las películas para televisión y Landa es un prolífico actor, formado en el teatro, que ha superado su propia etapa del “landismo” demostrando un amplio registro dramático con los principales directores españoles. La novela de Fernández Flórez, ambientada en la Galicia rural de comienzos del siglo XX, entusiasma al director manchego y sirve de inspiración al actor navarro para encarnar un personaje que pasará a formar parte del imaginario de la España tradicional.

Se trata de una historia amable donde el propio bosque es protagonista más que un mero escenario de fondo; es el anima, el alma, la razón de ser de esa forma de vida, las creencias, las costumbres… De otro modo no puede explicarse un personaje como Malvís -que se lanza a vivir como salteador de caminos bajo el nombre de Fendetestas, buscando la seguridad del bosque, para mal-robar a sus humildes vecinos aunque su sueño es atracar la casa del cura-, Geraldo el pocero -que siendo navegante soñaba con la tierra y sólo pudo volver a ella cuando un accidente le hizo dejar el mar-, la meiga Moucha -que conoce las plantas del bosque y el alma humana como si se tratara de un elemento más de la naturaleza-, Fiz de Cotovelo -cuya alma pena por el bosque al no haber podido cumplir una promesa pero cuya ilusión sigue siendo viajar a América-, las hermanas Roade –melindrosas mocitas viejas de ciudad que buscan la tranquilidad como turistas en una casa alquilada en el bosque-, Manuel el Loco de Vos -que vive en un mundo cuya felicidad irradia haciendo regalos a los señores del pazo, como si fuera uno de ellos-, Marica da Fame –una viuda sin recursos que pretende vivir del trabajo de sus hijos pequeños-… Los propios nombres parlantes de los personajes nos permiten intuir la realidad que trascienden.

Valoración: Siempre es un riesgo rodar una película basada en una obra literaria de la que existe una versión cinematográfica previa. Cuerda lo aborda acompañado de un equipo técnico impecable -del que destacan el guionista y el director de fotografía- y de los actores más representativos de la escena española -lo que confiere mayor familiaridad si cabe a los personajes-. Rafael Azcona es uno de los mejores guionistas del cine español, especializado en este tipo de temática. Quizás su vocación primera de escritor le permita la sensibilidad necesaria para convertir en diálogos esas maravillosas descripciones literarias y ajustar en un número de escenas adecuadas al metraje de la película los episodios más significativos de la novela. Por otro lado, Javier Aguirresarobe nos acerca por medio de una delicada fotografía a la atmósfera del bosque, a veces en penumbra, húmeda, misteriosa, otras alegre, jovial, llena de vida… Y qué decir del trabajo de los actores, destacando entre ellos a Alfredo Landa por su versatilidad y humanidad al encarnar un personaje tan contradictorio, que debiera despertarnos rechazo y a veces incluso nos sugiere ternura. Este buen hacer concede a la película un carácter de obra coral y un cierto aire de clasicidad que hace que no le afecte el paso del tiempo. 

No es una adaptación cinematográfica fiel a la obra literaria en el sentido de que se centra en los personajes humanos y omite toda la vida que late en la fauna y vegetación del bosque, como si no estuvieran entrelazados. Sin embargo, mantiene la estructura de estancias y muchos de los diálogos. Como dice el propio Fernández Flórez en su Ultílogo: “Y transcurrieron los días. Y los años. Y vino la Muerte y pasó su esponja por toda la extensión de la fraga y desaparecieron estos seres y las historias de estos seres. Pero detrás todo retoñaba y revivía, y se erguían otros árboles y se encorvaban otros hombres, y en las cuevas bullían carnadas recientes y la trama del tapiz no se aflojó nunca. Y allí están con sus luchas y sus amores, con sus tristezas y sus alegrías, que cada cual cree inéditas y como creadas para él, pero que son siempre las mismas, porque la vida nació de un solo grito del Señor y cada vez que se repite no es una nueva Voz la que la ordena, sino el eco que va y vuelve desde el infinito al infinito”.  

El canto a la naturaleza de la novela lo convierte el director en un sugerente camino entre la realidad y la magia, iniciado en su primera película Total (1985) y que continuará en otras creaciones más libres, hacia el absurdo, como la comedia Amanece que no es poco (1988) y Así en el cielo como en la tierra (1995). Fue muy premiada en la II edición de los Premios Goya: mejor película, actor protagonista, música original y vestuario.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Inter[sections]

Para retomar el curso os propongo este interesantísimo Congreso internacional sobre Arquitectura, Ciudad y Cine que tendrá lugar la semana que viene en Oporto.




















Lo organiza el Grupo de Investigación “Ruptura Silenciosa” de la Facultad de la Arquitectura de Oporto, centrado en estudiar las intersecciones entre el cine y la arquitectura portuguesa en el período de 1960-1974. Es una época marcada por numerosos acontecimientos históricos y fenómenos sociales (guerra colonial, emigración, agitación política) en la que se construye una nueva manera de hacer cine (más urbano, con figuras como Manoel de Oliveira y Fernando Lopes) y se produce una renovación de la arquitectura (proponiendo una tradición moderna los maestros Fernando Távora y Álvaro Siza, entre otros).

Los bloques temáticos que se desarrollarán tratan sobre cine urbano, sinfonías de la ciudad, espacio y política en el cine, identidad territorial en la pantalla y narrativas espaciales o arquitectónicas en el cine. Participamos con una comunicación sobre Cine y Patrimonio que podremos compartir una vez publicada. Aquí os dejamos el programa del congreso para conocer qué se está investigando en este tema.